CAFE DIARIO, EE.UU.– La tormenta tropical Priscilla ha puesto en alerta a diversas regiones del suroeste de Estados Unidos debido al riesgo elevado de inundaciones repentinas durante los próximos días.
Según informaron autoridades meteorológicas y el Centro Nacional de Huracanes (NHC), el fenómeno, que se formó en el Pacífico, avanza con fuerza decreciente, pero con el potencial de generar fuertes precipitaciones en estados como Arizona, Utah, Colorado y Nuevo México.
Priscilla perdió su categoría de huracán el pasado 8 de octubre, transformándose en tormenta tropical frente a la costa mexicana de Baja California Sur.
Actualmente, se localiza a aproximadamente 265 kilómetros al oeste-suroeste del extremo sur de la península de Baja California, con vientos máximos sostenidos de 72 kilómetros por hora y moviéndose hacia el noroeste a una velocidad de 13 kilómetros por hora.
El NHC advirtió que el núcleo de Priscilla se desplazará en paralelo a la costa de Baja California Sur, pero mar adentro, disminuyendo gradualmente en intensidad y probablemente evolucionando a ciclón posttropical para finales de esta semana. Mientras tanto, las lluvias asociadas a la tormenta ya han empezado a impactar la región.
Para México, se esperan lluvias moderadas, con acumulados de hasta 25 milímetros a lo largo de la península de Baja California.
En contraste, el suroeste de Estados Unidos podría recibir entre 50 y 100 milímetros de lluvia, con picos que podrían alcanzar hasta 150 milímetros en áreas puntuales, principalmente en el centro y norte de Arizona, el sur de Utah y el suroeste de Colorado.
Estas precipitaciones intensas aumentan significativamente el riesgo de inundaciones repentinas, especialmente en zonas urbanas y rurales vulnerables.
El NHC ha señalado que el centro de Arizona será particularmente afectado, con episodios de inundaciones probables entre el jueves 9 y el sábado 11 de octubre. También se esperan casos dispersos en el sur de Utah, el suroeste de Colorado y la esquina noroeste de Nuevo México.
Además de las lluvias, las costas del Pacífico mexicano ya experimentan olas altas y corrientes fuertes, que representan un peligro para quienes habitan o visitan las playas.
Las autoridades mantienen la vigilancia activa y han recomendado a la población extremar precauciones, estar atentos a las alertas oficiales y prepararse para posibles evacuaciones o cierres de vías si la situación lo requiere.
La temporada de tormentas en el Pacífico Oriental, que se extiende entre mayo y noviembre, suele generar estos episodios de lluvias intensas que afectan especialmente las regiones desérticas y montañosas del suroeste estadounidense, poniendo en riesgo a las comunidades por inundaciones y deslizamientos.
La vigilancia y preparación son clave para mitigar el impacto de Priscilla en los próximos días.
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