CAFÉ DIARIO, LONDRES.- La leyenda del heavy metal Ozzy Osbourne fue despedido este martes con una emotiva ceremonia en su ciudad natal de Birmingham, Reino Unido, rodeado del cariño de miles de fanáticos y de su esposa Sharon Osbourne, quien no pudo contener las lágrimas durante el homenaje.
El evento, que reunió a seguidores de todas las edades, se convirtió en una celebración de la vida y legado del vocalista de Black Sabbath, uno de los íconos más influyentes del rock mundial. La multitud, vestida de negro y con camisetas de sus giras más memorables, acompañó con cantos, lágrimas y aplausos la despedida de su ídolo.
Sharon, visiblemente afectada, ofreció unas palabras cargadas de emoción: “Ozzy fue y siempre será el alma rebelde de Birmingham y del rock. Gracias por amarlo tanto como nosotros”. La ceremonia incluyó una presentación audiovisual de su trayectoria y un tributo musical interpretado por artistas cercanos al cantante.
Aunque su salud lo había mantenido alejado de los escenarios en los últimos años, el “Príncipe de las Tinieblas” deja una huella imborrable en la historia de la música, marcada por su estilo provocador, su inconfundible voz y una carrera que desafió las normas.
La ciudad planea erigir un monumento en su honor, mientras el mundo del rock se despide de uno de sus más grandes íconos.
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