
CAFÉ DIARIO, SANTO DOMINGO.- El martes 19 de noviembre se conoció una tragedia que tuvo lugar en Jamundí, Valle del Cauca, Colombia. Allí, un hombre lanzó a su hija de 5 años de edad, por la ventana de su apartamento ubicado en el tercer piso de un conjunto residencial.
La menor de edad murió horas más tarde producto de las lesiones que sufrió con la caída y el hombre también falleció, luego de haber sido fuertemente golpeado por la comunidad en un hecho de la llamada justicia por mano propia.
Luego de confirmarse la muerte de la niña y su papá, una vecina contó que pudo existir otra víctima.
Las autoridades locales están investigando los hechos para esclarecer las circunstancias que llevaron a este desenlace. La muerte de la niña y el posterior linchamiento del hombre han generado un debate sobre la justicia por mano propia y la necesidad de reforzar la confianza en el sistema judicial para evitar que la población recurra a este tipo de acciones.
Este caso ha captado la atención de los medios y de la opinión pública, resaltando la urgencia de abordar temas de violencia intrafamiliar y la protección de los menores en situaciones de riesgo. La comunidad de Jamundí se encuentra consternada y en busca de respuestas ante este trágico evento que ha dejado una profunda huella en la localidad.
El padre lanza a su hija por la ventana
En un trágico incidente ocurrido en Jamundí, una niña fue lanzada desde la ventana de un tercer piso por su propio padre, según informaron las autoridades locales. La menor fue trasladada de inmediato a un centro asistencial en Jamundí y posteriormente remitida a la Clínica Valle de Lili en Cali debido a la gravedad de sus heridas. Lamentablemente, su muerte fue confirmada poco después de su ingreso.
El suceso, que tuvo lugar en la madrugada del 18 de noviembre, ha conmocionado a la comunidad. Según declaraciones del coronel Germán Manrique, el incidente se produjo en medio de una discusión familiar. Durante el altercado, el padre intentó lanzar a dos menores, pero una vecina logró intervenir y salvar a la hermana mayor de la niña fallecida.
La reacción de la comunidad fue inmediata y violenta. Enardecidos por el acto, los vecinos decidieron tomar justicia por mano propia y agredieron al padre de la menor.
Otro crimen contra niños en Colombia
Darwin Felipe Beltrán, de 31 años, sospechoso del asesinato de sus hijos, Santi Esteban Beltrán y Susan Camila Beltrán, de cuatro y siete años respectivamente, en el sector de Las Ferias en Engativá, Bogotá. El crimen ocurrió el 28 de octubre en una vivienda de inquilinato, tras un altercado con su expareja, madre de los menores. Medicina Legal determinó que el niño fue brutalmente golpeado y la niña también sufrió un ataque violento.

Este caso se suma a una preocupante tendencia en Colombia, donde casi a diario se reporta el asesinato de un menor de edad. Entre enero y agosto de este año, se registraron 375 homicidios de niños, según los Boletines Estadísticos de Medicina Legal. Un aspecto alarmante es que en muchos de estos casos, los presuntos responsables tienen antecedentes judiciales, lo que ha generado un debate sobre la necesidad de endurecer las penas para quienes cometen delitos contra menores.
El caso de los hermanos Beltrán no es aislado. La violencia contra menores en Colombia ha alcanzado niveles alarmantes, y las cifras reflejan una realidad que exige atención urgente. La sociedad y diversas organizaciones han comenzado a exigir medidas más severas para prevenir y castigar estos crímenes, buscando proteger a los más vulnerables.
fuente: periodista Manuel Ortiz, Rincón Informativo

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