


CAFÉ DIARIO, SANTO DOMINGO.- Desde antes de asumir el poder en 2020, el Partido Revolucionario Moderno (PRM) se ha visto obligado a enfrentar el comportamiento inadecuado de algunos de sus dirigentes.
Desde entonces, una serie de escándalos han salido a la luz pública de manera continua. En respuesta, el fiscal nacional, Tony Rodríguez, ha liderado las investigaciones y los procedimientos ante la Comisión Nacional de Ética y Disciplina del partido. El caso más reciente involucra al diputado Eugenio Cedeño por sus declaraciones sobre relaciones sexuales no consentidas.
Varios militantes de bajo rango han sido expulsados, pero esto no les ha impedido obtener empleos públicos. En contraste, la Comisión de Ética nunca ha decidido expulsar a los dirigentes de alto nivel, quienes continúan activos en su trabajo político.
Cuando los alcaldes asumieron el cargo el 24 de abril de 2020, Ronald Alberto Guillén Ureña publicó un video proclamando su poder y mostrando la yipeta oficial del Ayuntamiento de Puerto Plata. Al día siguiente, José I. Paliza, presidente del PRM, ordenó a la Comisión de Ética iniciar un proceso disciplinario con el veredicto anticipado de "expulsión inmediata". A pesar de ello, Guillén permaneció empleado hasta 2023.
El PRM suspendió a Emigdio Sánchez Montero, director municipal de Derrumbadero, San Juan, tras una acusación de violación sexual, y luego fue puesto en prisión preventiva por tres meses.
En algunos casos, otros dirigentes no recibieron castigos similares. Leonardo Faña, exdirector del Instituto Agrario Dominicano (IAD), enfrentó acusaciones de agresión sexual y fue absuelto con un "no ha lugar". Luis Maisichell Dicent, acusado de fraude en la Lotería Nacional, también fue encontrado inocente.
El diputado Sadoky Duarte, declarado culpable por agredir a una agente de la Policía Nacional, evitó la cárcel y sanciones.
El presidente Luis Abinader destituyó a la exministra de la Juventud, Kimberly Taveras, luego de cuestionamientos sobre el origen de su patrimonio de 106 millones de pesos. A pesar de no llegar a los tribunales.
El fiscal del PRM explicó que los señalamientos son para uso interno del partido y que, tras un análisis, envía las querellas con "méritos suficientes" al Tribunal de Disciplina del PRM, que es responsable de imponer las sanciones.
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