Contratos en la era digital: ¿Sabes a qué estás dando consentimiento al dar clic en “Acepto”?

Por: Esmildry Rodríguez Medrano

En un mundo cada vez más digital, es común que al descargar una aplicación, registrarse en una plataforma o realizar una compra en línea, se nos solicite aceptar términos y condiciones mediante un simple clic. No obstante, este acto, aparentemente trivial, tiene implicaciones legales significativas. ¿Qué estamos aceptando al hacer clic en "acepto"?

En este aspecto, en la República Dominicana, la Ley 126-02 sobre Comercio Electrónico, Documentos y Firmas Digitales establece el marco legal para las transacciones electrónicas. Conforme a esta ley, un contrato electrónico es válido siempre que las partes puedan ser identificadas y manifiesten su consentimiento por medios electrónicos. Esto significa que al hacer clic en "acepto", estás otorgando tu consentimiento de manera legal y vinculante (OGTIC, 2019). Asimismo, los tipos de acuerdos en línea con los que frecuentemente se interactúa, son los siguientes:

1. Clickwrap: Requiere que el usuario realice una acción afirmativa, como hacer clic en "acepto” o “sí, estoy de acuerdo", para manifestar su consentimiento. Este método es reconocido como legalmente vinculante (DocuSign, 2022).
2. Browsewrap: Implica que el usuario acepta los términos simplemente al usar el sitio web, sin necesidad de una acción explícita. Sin embargo, este tipo de acuerdo es más susceptible a disputas legales, ya que la aceptación no es evidente (Economist & Jurist, 2023).

Por consiguiente, existen implicaciones legales al aceptar términos y condiciones, porque estás entrando en un contrato que puede incluir cláusulas sobre:

• Uso de datos personales: Donde autorizas la recopilación y uso de tu información, lo que puede afectar tu privacidad.
• Limitaciones de responsabilidad: Donde la empresa puede limitar su responsabilidad en caso de problemas con el servicio o producto.
• Jurisdicción aplicable: Que determina qué leyes y tribunales regirán en caso de conflictos.

Por ende, por lo señalado anteriormente, es esencial leer y comprender estos términos, debido a que pueden tener un impacto significativo en tus derechos como consumidor.

De este modo, en referencia a la protección del usuario en República Dominicana, la Ley 358-05 General de Protección de los Derechos del Consumidor o Usuario indica que los proveedores deben informar de manera clara y veraz sobre las condiciones de los productos y servicios ofrecidos. A pesar de que, en la práctica, muchos términos y condiciones son extensos y complejos, lo que dificulta su comprensión por parte del consumidor promedio (ProConsumidor, 2015).

En este sentido, por todo lo planteado previamente, se sugiere para los usuarios en estos casos lo siguiente:

• Leer antes de aceptar: Es importante dedicar tiempo a revisar los términos y condiciones, especialmente las secciones relacionadas con privacidad y uso de datos.
• Buscar resúmenes: Para usar la opción que algunas plataformas ofrecen mostrando de una forma breve los términos para facilitar su comprensión.
• Ejercer tus derechos: Por si consideras que una cláusula es abusiva o ilegal, puedes presentar una reclamación ante la entidad u organismos correspondientes.

En síntesis, la era digital ha simplificado nuestra vida y, a la vez, ha introducido nuevas figuras jurídicas que, si no estamos atentos, pueden terminar envolviéndonos en situaciones legales. Ser consciente de lo que aceptamos es fundamental para protegernos. La próxima vez que encuentres un contrato digital, recuerda: leer antes de hacer clic puede marcar la diferencia.