CAFE DIARIO, SANTO DOMINGO.- Autoridades policiales y del Ministerio Público hallaron este jueves restos humanos calcinados en la residencia de Lisset Melenciano Tejada, una mujer reportada como desaparecida desde el pasado 5 de octubre, en el sector Kilómetro 3½ del municipio cabecera de esta provincia.
El macabro descubrimiento se realizó durante un operativo conjunto de la Subdirección Regional de Investigación (DICRIM) de la Policía Nacional y fiscales del Ministerio Público. Según el informe preliminar, los agentes identificaron un área de tierra removida en el patio frontal de la vivienda, lo que levantó sospechas.
Durante la excavación, los investigadores encontraron un hoyo parcialmente cubierto con ramas secas, con rastros visibles de gasoil.
En su interior se hallaron fragmentos óseos y restos calcinados, presuntamente con características compatibles con tejido humano. Estos restos fueron levantados cumpliendo con el protocolo de cadena de custodia y trasladados al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), donde serán sometidos a estudios de identificación y análisis antropológicos.
Investigación en curso y búsqueda de responsables
Las autoridades no han confirmado de manera oficial que los restos correspondan a Melenciano Tejada, pero indicaron que todo apunta a esa posibilidad, dado que fueron encontrados en su propiedad y no se ha tenido contacto con ella desde el día de su desaparición.
Familiares y vecinos han manifestado profunda preocupación y exigen una respuesta rápida sobre lo ocurrido.
La Policía Nacional mantiene abierta la investigación y no descarta ninguna hipótesis. "Estamos siguiendo todas las líneas posibles para esclarecer este caso y dar con los responsables", afirmó un vocero del cuerpo del orden, quien solicitó colaboración ciudadana para aportar información útil.
Reacciones de la comunidad y consternación
La noticia ha generado conmoción en el sector Kilómetro 3½, donde la víctima era conocida y tenía varios años residiendo. Vecinos describieron a Lisset como una persona tranquila, y algunos aseguran haber escuchado ruidos extraños días atrás, aunque no imaginaron que se tratara de un hecho tan grave.
Diversas organizaciones comunitarias y de derechos humanos han solicitado que se garantice la transparencia del proceso y se proteja a los familiares de la víctima. Mientras tanto, la comunidad espera con angustia los resultados del INACIF para confirmar si, en efecto, los restos pertenecen a la mujer desaparecida.
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