CAFÉ DIARIO, ESTADOS UNIDOS (AFP). – El aborto se ha vuelto ligeramente más común en Estados Unidos, a pesar de las restricciones impuestas tras la anulación del histórico fallo Roe vs. Wade en 2022. La decisión de la Corte Suprema de revocar este caso permitió que los estados implementaran sus propias prohibiciones, pero los datos muestran que, lejos de disminuir, los abortos han aumentado, especialmente en los estados con mayores restricciones.
Según investigaciones del Instituto Guttmacher, el número de abortos mensuales ha experimentado un leve aumento en comparación con los meses previos a la decisión del caso Dobbs vs. Jackson Women’s Health Organization. Sin embargo, en los estados con prohibiciones estrictas, el acceso al aborto ha caído casi a cero, lo que ha llevado a muchas mujeres a buscar alternativas como los viajes hacia otros estados o el uso de píldoras abortivas, que ahora representan aproximadamente dos tercios de los abortos realizados en el país.
La telemedicina ha jugado un papel crucial en este cambio, ya que se estima que para el verano de 2024, uno de cada diez abortos será realizado mediante píldoras prescritas a distancia, principalmente en estados con prohibiciones. Esto ha dado lugar a batallas legales, como la reciente demanda de Texas contra un médico de Nueva York por recetar píldoras abortivas a una mujer en el estado de Texas. Estados como Idaho, Kansas y Missouri también están tomando medidas para clasificar estos medicamentos como "sustancias controladas", lo que podría dificultar aún más el acceso.
El aumento en los viajes para abortar es otra de las tendencias emergentes. Mujeres de estados con fuertes restricciones, como Texas, han comenzado a viajar a otros estados cercanos, como Nuevo México y Kansas, para acceder a servicios legales de aborto. Esto, sin embargo, ha aumentado los costos, lo que ha llevado a la creación de fondos de ayuda para sufragar estos gastos. A pesar de este esfuerzo, algunos fondos han tenido que limitar las ayudas debido al alto volumen de solicitantes.
El panorama del aborto en Estados Unidos continúa cambiando, con legisladores y tribunales ajustando constantemente las leyes sobre la legalidad del aborto en diferentes estados. En Florida, por ejemplo, una nueva prohibición del aborto a las seis semanas, implementada en mayo de 2023, ha disminuido significativamente el número de abortos en el estado, con un 30% menos en los meses siguientes.
En respuesta a las restricciones, algunos estados han ampliado sus clínicas para abortos, ofreciendo servicios a mujeres de estados cercanos con prohibiciones estrictas. Illinois, Kansas y Nuevo México han visto un incremento en la oferta de estas clínicas.
A pesar de los obstáculos, la lucha legal y política sobre el aborto sigue siendo uno de los temas más debatidos en Estados Unidos. La mayoría de los votantes, incluso los de estados controlados por republicanos, han mostrado apoyo a la legalización del aborto en todos o la mayoría de los casos. Según datos de AP VoteCast, más de tres quintas partes de los votantes en 2024 apoyaron el derecho al aborto, lo que sugiere que la legalidad del aborto sigue siendo un tema central en la política estadounidense.
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