CAFÉ DIARIO, BRASIL (EFE). – Al menos 37 personas perdieron la vida en un trágico accidente ocurrido la madrugada de este sábado en el estado de Minas Gerais, Brasil, en un choque que involucró a un autobús, un camión y un vehículo de turismo. El incidente se produjo en la carretera BR-116, cerca del municipio de Teófilo Otoni, y dejó a decenas de personas atrapadas y carbonizadas entre los hierros retorcidos de los vehículos.
El accidente comenzó cuando el conductor del autobús, que transportaba inicialmente a unos 45 pasajeros, perdió el control del vehículo tras un impactante suceso: un gran bloque de granito que cayó de un camión que circulaba por la misma vía golpeó fuertemente el autobús. El impacto provocó un incendio en el vehículo, que terminó completamente destruido. El fuego dificultó las labores de rescate y la identificación de las víctimas, lo que llevó a un aumento en la cifra de muertos, que inicialmente fue de 22, pero que con el avance de los trabajos se incrementó a 37.
La Policía Federal de Carreteras explicó que la cifra de víctimas es preliminar debido a la dificultad para identificar los cuerpos, ya que el incendio dificultaba las tareas de rescate. Además del autobús, otro vehículo que circulaba detrás también colisionó con el camión que transportaba el bloque de granito. Los tres ocupantes de este automóvil sufrieron heridas graves pero sobrevivieron al choque.
En total, 13 sobrevivientes del autobús fueron trasladados a hospitales cercanos, algunos de ellos con lesiones graves. Los bomberos y las fuerzas de seguridad locales trabajaron intensamente desde la madrugada para atender la emergencia.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, expresó su profunda tristeza por la tragedia, ofreciendo su solidaridad a los familiares de las víctimas y asegurando que rezaba por la recuperación de los heridos. "El Gobierno federal se coloca a disposición del Ayuntamiento de Teófilo Otoni y del Gobierno de Minas Gerais para todo lo que sea necesario", escribió en sus redes sociales.
Por su parte, el gobernador de Minas Gerais, Romeu Zema, informó que había ordenado la movilización total de las fuerzas del Ejecutivo regional para apoyar las labores de rescate y atención a los afectados. Las autoridades locales continuaron trabajando sin descanso desde las primeras horas del incidente para atender la situación con la mayor rapidez posible.
Este devastador accidente pone de relieve la grave situación de la seguridad vial en algunas regiones de Brasil, donde los accidentes de tráfico siguen siendo una de las principales causas de muertes en el país. Las autoridades continúan investigando las circunstancias exactas del suceso, mientras el país llora la pérdida de tantas vidas en este trágico evento.
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